lunes, 2 de marzo de 2009

Angelina o el honor de un brigadier

El 2 de marzo de 1934 se estrenó en el teatro María Isabel de Madrid, por la compañía de María Bru y José Isbert, Angelina o el honor de un brigadier, una caricatura en una presentación y tres actos (el segundo dividido en tres cuadros), en verso, con ilustracio­nes mu­si­cales de Ricardo Boronat. Permaneció en cartel hasta el 30 de abril de ese mismo año, dándose 21 represen­ta­ciones. Y contando las que se dieron después de la guerra, llegaron a 130.

Se trata de una parodia del drama post-romántico que, al mismo tiempo que hace sonreír, invita a refle­xionar al espec­tador. Su argumento se basa en dos piezas anteriores: La pasionaria, de Leopoldo Cano (estrenada el 14 de diciembre de 1883, cuya pro­ta­gonista se llama igualmente Angelina), y El nudo gordiano (el 28 de noviembre de 1878), de Eugenio Sellés.

Su argumento, a grandes rasgos, es el siguiente:


El cínico Germán, amante de Marcela, se encapricha de su hija Angelina, pro­me­tida a su vez al poeta Rodolfo. Germán engaña a Angelina y huye con ella, pero tras sus planes frustrados es retado a duelo y herido gravemente por el padre de la joven, el brigadier Marcial. Éste descubre además que Germán ha mantenido relaciones ilícitas con su esposa, y éste le pide perdón para ella. Cuando está punto de desencadenarse una tragedia, llega no obstante el perdón debido a la apari­ción so­bre­natural de los padres de Marcial, quienes le muestran que también ellos fueron infieles en su momento.

Por lo que se refiere a la técnica del verso, hay que indicar que está escrito en verso octosílabo y con rima consonante, lo cual no deja de ser un alarde de técnica, aun cuando se aprecian algunos ripios y vocablos burlescos. Abundan las rimas internas, la repe­tición de sonidos consonánticos y las licencias métricas. También hay al­guna rima buscada con fines puramente humo­rísticos. Y las figuras lite­rarias empleadas resultan de lo más variado: juegos de palabras, calambures, parono­masias, etc.




Quizá la obra va de menos a más, con un primer acto menos brillante, en el que apenas hay des­tellos de esa genialidad que caracteriza a Jardiel. Es en la escena del cementerio -que nos re­cuerda en algo a aquella otra del Tenorio de Zorrilla- donde alcanza el punto álgido, con unas hi­larantes inter­ven­ciones a cargo del médico, don Elías, y de un capellán que suelta latinajos sin venir a cuento. Hay una escena antológica en la que todos buscan una moneda lanzada al aire que ha caído en la arena del cemen­terio, que contrasta con la solemnidad del propio ceremonial de sortear las pistolas antes del duelo.
Los personajes están bien logrados, en especial don Marcial, sobre quien gravita el peso de la obra. También son de destacar la propia Angelina, Marcela, Germán y un ban­quero, paradó­ji­ca­mente lla­mado don Justo. En cam­bio, decepciona un poco el personaje de Rodolfo, el novio de Angelina, que resulta un tanto diluído.
Los anacronismos son frecuentes, aunque algunos parecen deliberados. También se aprecia al­gún detalle poco verosímil, como una mentira que cuenta Angelina a Rodolfo, a propósito de haberla visto besarse con el pérfido Germán. O las espectrales apariciones de los padres del brigadier, que tal vez deberían haber provocado una estampida general de los asistentes.

Obra exitosa como pocas, de la que incluso se llegó a realizar una adaptación cinematográfica en Hollywood a cargo del propio Jardiel, el mismo año de ser estrenada, con Louis King en la dirección y la estrella Rosita Díaz Gimeno en el papel estelar. Se trata de la primera película en verso de la historia del cine, con unos diálogos que son obra del propio Jardiel.

A lo largo de los años, se ha representado y/o editado con dos títulos diferentes: bien como Angelina o el honor de un brigadier o como Angelina o un drama en 1880. La censura fran­quista tuvo buena parte de culpa de que se suprimiera del título la mención al esta­mento militar, por considerar que ello era reírse del ejército.

1 comentario:

  1. será interesante seguir este blog:
    http://elblogdeangelina.blogspot.com/
    un saludo a todos los jardielistas
    cristina

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